La imagen satélite de la avalancha sobre el glaciar Khurdopin será una de las imágenes Landsat que pasarán a la historia por conseguir combinar lugar y momento obteniendo la imagen con la que todo fotógrafo profesional soñaría. Una imagen del momento exacto de una espectacular avalancha es inmortalizada entre los brillantes píxels de las bandas de Landsat 5.
En los análisis con teledetección nunca encontrarás una última imagen con la morir pensando que ya lo has visto todo en este campo. Pero siempre habrá una primera imagen que te atraiga tanto como para sumarte al fascinante mundo del análisis de sensores remotos y la fotointerpretación aérea. La imagen de esta particular avalancha es un ejemplo que engatusaría a cualquier amante de los Sistemas de Información Geográfica enganchándole a seguir fotointerpretando el territorio hasta el fin de sus días, al menos a mí me enganchó para entender cómo la teledetección permite realzar lo que los ojos no ven.
Hace poco más de 20 años, el 17 de abril de 1996, la teledetección y el azar se alinearon a bordo del Landsat 5 para capturar una descomunal avalancha sobre el glaciar Khurdopin entre las montañas de Karakórum al norte de Pakistán. Un desastre natural que ocurre en cuestión de segundos y que Landsat tuvo la suerte de presenciar e inmortalizar. La imagen pasó desapercibida durante años hasta que fue rescatada por el equipo de analistas de Jakob Steiner de la Universidad de Utrecht junto a otras imágenes. La imagen a color natural, en la que inicialmente no se aprecia nada relevante, cuenta una historia diferente al trabajar las bandas en falso color.
Una de las particularidades de las masas de nieve es su gran reflectancia a lo largo del espectro electromagnético lo que hace que la imagen a color natural muestre un exceso de brillo y en la que no poner mucha atención. Las bandas del visible ofrecen la máxima reflectancia para descender a lo largo del espectro hasta la región del SWIR donde el hielo pasa a mostrar una mayor absorción. Es por ello que los grandes brillos de reflectividad de la nieve apenas permiten advertir nítidamente el desastre hasta que empezamos a jugar con las bandas del infrarrojo cercano de Landsat 5. ¿Ves la avalancha? Ya no la ves.
Uno de los filtros RGB que podemos emplear para trabajar el análisis de masas de agua helada con Landsat 5 es la combinación RGB157. El juego de bandas actúa en la zona del azul visible de gran reflexión junto a las bandas del SWIR 1 y SWIR 2 de mayor absorción. El resultado nos ayuda a realzar las zonas de nieve pudiendo contemplar los cristales de hielo en suspensión generados por la avalancha.
Que los ojos no te engañen. Lo que parece una avalancha “plana” no es ni más ni menos que un espectáculo de nieve contra la gravedad. Empleando un Modelo Digital de Elevación de la zona a alta resolución, podemos reconstruir las laderas de las montañas de Karakórum y visualizarlas en altura contemplando en 3D las inmediaciones del escenario de la avalancha. Un desplazamiento de la columna de nieve arrasa el glaciar pasando a la ladera contraria y ascendiendo ligeramente en altura.
Aunque los volúmenes de la avalancha nunca llegaron a ser capturados por parte del DEM, podemos hacer de las imágenes de Landsat 5 una secuencia de imágenes 3D mediante la composición de anáglifos con el fin de generar sensación de profundidad a través de la imagen plana y la ayuda de nuestras gafas estereoscópicas 3D. ¡A ponerse las gafas 3D!
Siendo una imagen a guardar en todo álbum de fotos aéreas, aquí tenéis el juego completo de bandas con las que componer las imágenes RGB a falso color o color natural y disponibles desde Land Viewer.
