El que no ha pasado miedo volando el dron y pensando que tarde o temprano llegará a perderlo pasando las horas muertas en su busca y captura es que no quiere a su dron como un hijo. Y si a las vacas y ovejas les ponemos cencerros para no perderlas de vista… llega TrackR para tener controlados nuestros drones si algo falla.

TrackR es un sistema más para localizar futuros objetos perdidos con ayuda de un sencillo emisor del tamaño de una moneda, lo que da juego para incorporarlo en nuestro dron sin incrementar excesivamente el peso. Dispone de cuatro colores: acero, negro, oro rosado y azul (aunque si está hecho para perderlo digo yo que el color dará un poco igual). Presenta un diámetro de 31 mm, 3,5 mm de grosor y una duración de batería de 1 año (pudiendo reemplazar posteriormente la batería).

¿Cómo funciona TrackR? Fácil. Lo único que tenemos que hacer es colocar el dispositivo donde queramos tener controlados nuestros objetos más preciados o con facilidad de perderse. Para unos el bolso, para otros el móvil, para otros el perro y para otros nuestro hijo tonto más querido: el dron. El dispositivo TrackR permite ser localizado en nuestra red de alcance y podemos visualizar su posición con una sencilla App. A través de ella podremos localizar el dispositivo vía GPS con ayuda de mapas de seguimiento, e incluso hacerle sonar para localizar más fácilmente nuestro dron. Sencillo y sin mucho misterio.

Teniendo en cuenta el tamaño y las ventajas que ofrece cabe pensar en lo poco accesible que puede llegar a ser económicamente. Pues nos equivocamos. TrackR cuesta relativamente poco para lo mucho que podemos llegar a ganar si se pierde nuestra aeronave. Por apenas 25 euros (más gastos de envío) podemos comprarlo directamente en la web de manera individual o a puñados (por aquello de controlar el coche, el bolso, al niño, la pareja…). También existe la opción de realizar el grabado de un número de teléfono sobre el dispositivo y en caso de que alguien lo encuentre poder contactar con nosotros (confiemos en la buena fé de la gente). Y cómo no, podremos añadirle llaveros y colgajos si deseamos anclarlo en algún sitio (consumismo estético puro y duro). Otras opciones algo más caras las podemos encontrar por Amazon e incluso receptores de segunda mano.

Suerte y si pierdes el dron y no tienes TrackR no te preocupes… nos solidarizamos todos por la pérdia 🙂